Es la anchura mínima de material que se puede cortar sin problemas. La anchura mínima de corte no tiene nada que ver con la rebaba. La rebaba es el grosor del residuo generado por la máquina de corte, y se puede modificar en los ajustes del grupo de materiales.

El mejor ejemplo para visualizar esta función es el vidrio y su método de corte. Las láminas de vidrio se cortan con una cuchilla especial y se escinden. Si el trozo escindido es demasiado estrecho, puede ser muy complicado. Por eso, a la hora de cortar vidrio, la opción anchura mínima de corte es muy deseable.

La anchura mínima de corte atañe principalmente al residuo. El objetivo es generar un segmento fácil de cortar, teniendo en cuenta las limitaciones de la máquina, el material y el operario.